El Reino Unido anunció nuevas sanciones dirigidas a medios de comunicación y canales de información rusos, incluyendo el canal de Telegram Rybar, junto con las firmas chinas i-Soon e Integrity Technology Group, por su participación en la guerra de información y extensas actividades cibernéticas.La Secretaria de Asuntos Exteriores,
Yvette Cooper, afirmó que estas acciones, que describió como intentos de desestabilizar democracias y socavar intereses nacionales, forman parte de un esfuerzo más amplio de las naciones occidentales para combatir amenazas híbridas como la desinformación y el sabotaje.