El ex cornerback de los San Diego Chargers, Quentin Jammer, reveló que jugó al menos ocho partidos de la temporada 2011 estando muy intoxicado, atribuyendo este comportamiento a un divorcio difícil.Jammer admitió tener botellas de tequila en su bolsa y afirmó haber rendido bien a pesar de su condición, excepto en un partido donde experimentó alucinaciones.