Donald Trump ha sufrido varios reveses judiciales en sus intentos de nombrar leales como fiscales federales principales, eludiendo la confirmación del Senado y vulnerando la Federal Vacancies Reform Act.Alina Habba y Lindsey Halligan fueron apartadas tras superar el plazo legal de 120 días, y el cargo de John Sarcone es impugnado por Letitia James por presunta evasión de la ley federal.Estas sentencias subrayan que el proceso de nombramiento debe seguir las exigencias constitucionales y destacan que la confirmación por el
Senado evita abusos del poder ejecutivo.