La Unión Europea ha acordado un nuevo objetivo climático, que busca una reducción del 90% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2040 en comparación con los niveles de 1990.Este acuerdo, alcanzado por los negociadores de la UE, suaviza significativamente la propuesta inicial de la Comisión Europea de en julio, posponiendo la inclusión de combustibles en el sistema de comercio de emisiones (ETS2) hasta 2028.Jonas Sjöstedt y
Lena Schilling, entre otros, consideraron el objetivo un paso importante, a pesar de reconocer los desafíos y algunas críticas sobre su ambición y detalles de implementación.