Donald Trump firmó una orden ejecutiva que establece un marco federal para la regulación de la IA, con el objetivo de anular las leyes estatales en los EE. UU.La orden instruye a agencias como el Departamento de Justicia y el Departamento de Comercio para impugnar las regulaciones estatales de IA y elaborar directrices que podrían afectar las subvenciones federales, mencionando específicamente estados como California y Nueva York.Esta medida, impulsada por grupos de la industria tecnológica para asegurar el dominio global de
EE. UU. en
IA frente a China, enfrenta críticas de funcionarios estatales, sindicatos y grupos de derechos civiles preocupados por la protección del consumidor y la constitucionalidad.