Sudáfrica expulsará a siete kenianos que trabajaban para el programa estadounidense de reasentamiento de Afrikáneres, dijo el Departamento de Asuntos Internos, tras informes de inteligencia que indicaron que algunos kenianos entraron con visados de turista y supuestamente ocuparon puestos en un centro que tramita solicitudes de refugiados, y después de que se interrogara anteriormente al personal estadounidense y de una protesta frente a la embajada de EE. UU..Las expulsiones agravan la ruptura diplomática por la campaña de
Donald Trump para admitir Afrikáneres: Estados Unidos ha fijado un tope de 7.500 admitidos y ha tomado medidas punitivas como congelar ayuda y excluir a
Sudáfrica de eventos del
G20, mientras
Tommy Pigott del
State Department exige aclaraciones y las autoridades sudafricanas y las investigaciones de
CNN rechazan las acusaciones de un genocidio blanco.