Mark Rutte, secretario general de la OTAN, advirtió en Berlín que Rusia podría atacar a un miembro de la OTAN en un plazo de cinco años, instando a los aliados a aumentar rápidamente los esfuerzos de defensa y a prepararse para un conflicto a gran escala, similar a las Guerras Mundiales.Rutte enfatizó que Rusia es la principal amenaza, sostenida por un significativo apoyo tecnológico chino, mientras que Vladimir Putin declaró a Rusia "lista para la guerra" y Serguéi Lavrov delineó las "líneas rojas" rusas.El jefe de la
OTAN subrayó la necesidad de apoyar a Ucrania y aumentar la producción de municiones para disuadir la agresión, afirmando que una guerra tan devastadora es prevenible si la
OTAN actúa con decisión, a pesar de los comentarios críticos de
Donald Trump sobre Europa.