Ajax condenó la suspensión del partido en el Johan Cruyff Arena contra el FC Groningen tras interrupciones violentas de sus aficionados con fuegos artificiales y bombas de humo.El árbitro Bas Nijhuis detuvo el juego y luego decidió abandonar definitivamente el encuentro debido a incidentes continuos en la grada, alegando preocupaciones por la seguridad de los jugadores y el público.Shashi Baboeram Panday y la
KNVB criticaron la conducta, confirmaron que el partido continuará a puerta cerrada desde el minuto 7 con 0-0, y recalcaron que los fuegos artificiales no deben estar en el fútbol.