Paul Doyle fue condenado a 21 años y seis meses el 16 de diciembre tras declararse culpable de 31 cargos por haber atropellado a la multitud en el desfile del campeonato de Liverpool en mayo, después de informes iniciales de más de 130 heridos.El juez Andrew Menary dijo que las acciones de Doyle causaron un terror y una destrucción sin precedentes, y los fiscales presentaron imágenes que muestran que siguió a una ambulancia por cierres de calles antes de arremeter contra la multitud con un Ford oscuro.Las víctimas describieron daños físicos y psicológicos duraderos; la policía descartó un motivo terrorista y las autoridades dijeron que seguirán apoyando a los heridos y persiguiendo los asuntos pendientes.