La administración de Donald Trump está involucrada en una disputa legal con la National Association for the Deaf sobre el requisito de interpretación en tiempo real del lenguaje de señas americano (ASL) en las conferencias de prensa y eventos de la Casa Blanca.Un juez federal ordenó a la
Casa Blanca proporcionar interpretación ASL para las declaraciones de
Donald Trump, un fallo que la administración ha apelado, argumentando que tal requisito interfiere con la prerrogativa del Presidente de controlar su imagen pública y que existen métodos de acceso alternativos.