Los legisladores aprobaron un paquete de gasto militar de casi €50.000 millones para equipar con urgencia a la Bundeswehr, llevando los proyectos de armamento para 2025 a casi €83.000 millones tras la publicación de un plan plurianual más amplio.El comité de defensa convirtió fondos previstos en pedidos firmes que incluyen unos €22.000 millones para equipos de protección personal y ropa y cerca de €10.000 millones para la modernización de vehículos de combate de infantería, defensa aérea y sistemas de misiles, mientras que documentos del Ministerio de Defensa detallaban municiones kamikaze, planeadores hipersónicos y un contrato de alrededor de €700 millones con Elbit Systems.Expertos y organizaciones de derechos, entre ellas el Comité Internacional de la Cruz Roja, y políticos como
Sara Nanni advirtieron sobre riesgos legales, éticos y de escalada y criticaron la reintroducción del servicio militar y las compras directas simplificadas impulsadas por
Boris Pistorius.